PARA QUE SEAMOS TRES - UNA EXPERIENCIA CARIBEÑA es el blog en el que narraremos nuestro camino hacia la maternidad lesbiana en la Isla de Margarita, en Venezuela.

Quienes somos
Nos llamamos Fernanda y Mónica y estamos juntas desde hace muchos años, aunque "bien juntas" un poco menos.

Tanto Mónica como yo habíamos desechado, por diferentes motivos, la idea de ser madres, hasta que un día nos pusimos a jugar con la idea. A medida que nos adentrábamos en el tema cada vez nos ilusionábamos más y comenzamos a investigar las posibilidades existentesque para una pareja de mujeres que desean completar su unión con un hijo.

Los numerosos blogs de otras compañeras de camino (¡lamentablemente ningunas de Venezuela!) nos permitieron ir adentrándonos en un área que paulatinamente fue perdiendo parte de su incógnito.
Constantemente Mónica pasaba horas leyendo los blogs de parejas de diferentes países para saber a qué nos ibamos a enfrentar. Uno de esos blogs estaba titulado con lo que al final de cuentas resumía el camino que nos disponíamos transitar y esa frase quedó grabada en nuestras mentes : " El tren de largo recorrido".
Cada vez que iniciábamos la conversación no quedábamos en nada concreto, ya que los obstáculos, sobre todo los relativos a conseguir los benditos espermatozoides, parecían monumentales. En realidad, de lo único que estábamos seguras era de querer tene un bebé, pero a la vez sentía como si estuviera a punto de saltar al vacio. Mónica tiene una histerectomía, asique obviamente no se puede embarazar, lo que me deja a mí con el camino más arduo o por lo menos que mayores temores inspira (embarazo, parto, dolor, etc).

Tuvimos largas conversaciones para tratar de buscar al posible padre de nuestro bebé.
Para nosotros lo ideal hubiera sido poner un huevo, porque así lo podriamos empollar juntas hasta que saliera de su cascarita, pero lamentablemente la realidad es otra...
En una ocasión estuvimos pensando en cómo embaucar a algún banco de semen andante,(hombre) pero nada mas la idea de terminar en la cama con un hombre me daba vértigo, y a Mónica tampoco le agradaba mucho imaginarme en brazos de otra persona.

En una ocasión vino un amigo alemán con exelentes caracteristicas físicas e intelectuales y nosotros lo observábamos como si estuviéramos buscando un macho para alguna de nuestras perritas, o sea de buen pedigree y que los cachorritos salieran bonitos, sanos e inteligentes, jejeje... Mónica me impulsaba a seducirlo y me aconsejó que si él se ponia preservativo, lo rompiera con los dientes, disimuladamente, pero yo no entendia como iba a poder romperlo ya que tengo aparatos en los dientes; me imaginaba la escena y me visualizaba con un condon enredado entre los brakets, jajajajaja.... asi que entre risas desechamos la idea.

Después de la partida del macho alemán, quedamos un poco deprimidas ya que habiamos perdido la oportunidad con semejante prospecto, asique no conversábamos demasiado sobre el inicio sino mas bien lo que haríamos cuando el bebé estuviera con nosotras. Pensamos en hablar con otro amigo austríaco - y no es que nosotras tengamos algun tipo de fijacion con esos países, sino que suponíamos que con los europeos, por su frialdad, nos evitarímos futuros posibles reclamos de paternidad; pero tampoco estábamos demasido convencidas de él, ni de que aguantaria el trote de posibles varias sesiones de inseminación artificial (a esa altura ya habíamos decidido que el camino sería la inseminación artificial). La tercera alternativa era un amigo mío venezolano (gay) a quien quiero mucho, vive en España, pero obviamente eso iba a incrementar los costos y no teníamos la absoluta seguridad de su salud ya que hace muchos años que no lo veo, asique también desechamos ese posible donante.

Mónica siendo usuaria activa y devota del internet, estuvo revisando las paginas web de las clinicas de reproduccion asistida en venezuela. El director de una de ellas expresaba claramente que solo atendian parejas heterosexuales. Con respecto a los bancos de semen, uno de ellos especificaba que se nutría con semen de estudiantes universitarios y de hombres que conservaban su esperma previo a radio y/o quimioterapia ( enfermos de cancer).
Sobre Margarita no encontramos ninguna informacion, pero cerca de nuestra casa existe una pequeña clinica de maternidad, con Unidad de Fertilidad y de la cual no teniamos ninguna referencia ni información.

Primeros pasos:

El Martes 27/10/09 estaba en la oficina pensando como tantas veces, cómo podriamos materializar nuestro sueño de ser mamás. Decido que ya lo habíamos conversado suficientemente y que era el momento de actuar. Yo había pensado que el método "casero" era un sacrificio que ambas podríamos intentar sobrellevar, en aras del cumplimiento de nuestra meta mayor, que era quedar embarazadas. Pero estaba claro que resultaría inviable, el desgaste emocional, tanto para ella como para mí, era excesivo, por lo que deberíamos recurrir a ayuda especializada y encaminarnos en el arduo trayecto de inseminación con sperma congelado, pensé. Llamo a Fernada y le digo que esa misma tarde pediré una cita en la Unidad de fertilidad - que será nuestro primer paso por ser el mas accesible; dependiendo del resultado decidirámos cual serian nuestros próximos movimientos. Finalmente fue ella quien llamó y nos dieron la cita para dos días después, el jueves 29/10/09 a la 10:30 am, o sea hoy, fecha en que iniciamos este blog.

Como todas las mañanas Mónica me despierta con carñitos y me pide que me vaya al gimnasio, ya que debo rebajar unos diez kilos para que el embarazo no me afecte demasiado la espalda ya que soy de talla pequeña y tengo algo de sobrepeso. Los nervios me dieron por nublar mi mente y entré en una especie de letargo, mientras Mónica insistia en levantarme de la cama y yo no hice más que esonderme debajo del edredón mientras ella recorría toda la casa buscándome, hasta que al final dio con mi escondite. Asique finalmente me puse en pie, me di un buen baño, fui corriendo al closet y decidi vestirme con la mejor ropa que tuviera, ya que la ocasión lo ameritaba: pantalón azúl de gabardina, camisita celeste y botitas negras.
Mientras yo me vestia, Mónica no paraba de fumar, caminar por toda la casa e ir al baño (diarrea nerviosa), hasta que finalmente estuvimos listas para ir a la clínica. Como era temprano, decidimos parar en una panaderia cercana a la clinica, donde el café sólo sirvió para regar la mesa y Mónica trataba de contener sus movimientos gástricos que eran como réplicas de algún movimiento telúrico.

Antes de entrar a la clinica, nos tomamos la primera foto como inicio del registro de este viaje. La espera parecía eterna, los temores se amontonaban formando una masa pesada sobre mis hombros (me sentia literalmente encorbada). Temores en parte relacionados a cómo reaccionaria la doctora cuando supiera que buscabamos un embarazo sin padre - en realidad con dos madres. Para aflojar los nervios, se me ocurrió conversar con Fernanda sobre el nacimiento de nuestro bebé, le dije que queria que fuera algo íntimo debido a mis raices sureñas, ya que para los venezolanos es toda una celebración a la que se unen familiares y amigos en general. Esto fue motivo de un pequeño desacuerdo que superamos rapidamente con algunos besitos jejeje para liberar tensiones.

La doctora nos resultó muy agradable y no pareció soprenderse cuando Fernanda le explicó que el embarazo era deseado y buscado - pero sin sexo con un hombre. Cuando hablamos sobre el semen que se utilzaría, ella nos explicó que en Margarita no existe banco de esperma, por lo que trabajan con semen fresco. Y - ¡esa fue la principal y agradable sorpresa del día! - incluso se encargarían de conseguir donante, si así lo deseamos. El donante sería un estudiante universitario, con carácterísticas físicas parecidas a las de la madre bilológica y quien además sería examinado para evitar enfermedades infecciosas y/o genéticas. Mientras Fernanda se apronta para el ecosonograma transvaginal de rigor, aprovecho para conversar un poco con la doctora.

Me preocupaba la elección que pudieran hacer del donante, asique le dije de frente que obviamente Fernanda y yo éramos pareja y que en realidad deseábamos un donante con características físicas parecidas a las mías, con el fin de que el o la niña tuviera, de ser posible, algún parecido también conmigo. La doctora abrió un poco los ojos, pero fue cuestión de uno o dos segundos, inmediatamente reaccionó y con una sonrisa me dijo que por supuesto, que comprendía que el niño se debía parecer también a mí.
Durante el ecosonograma se evidenció - oh sorpresa! - que Fernanda estaba ovulando, pero recién estamos en el inicio de los estudios sobre su fertilidad. El plan, en principio, es prepararnos para salir embarazadas en abril del año que viene, momento en el cual el seguro de maternidad de Fernanda estará activo. Según indicaciones de la dra, tenemos que esperar la próxima menstruación para revisar los niveles de progesterona, además de los exámenes de sangre de rutina. Una vez que tengamos los resultados, debemos regresar donde la doctora y juntas tomar una decisión sobre cuando iniciar el tratamiento de desarrrollo de folículos (le explicamos nuestro temor a un embarazo múltiple por ser Fernanda tan pequeña de talla, pero la dra. explicó que la probabilidad de embarazo múltiple es sólo del 2%).
Inclusive le dije que si el "donante perfecto" aparece antes, no nos importaría adelantar todo el proceso, aunque ello implicara perder los beneficios del seguro.

Salimos de la consulta aliviadas y felices. Se habían disipado casi todos los temores e incluso la posibilidad de emplear semen fresco en vez de congelado, aumentaría las probabilidades de embarazo. También estábamos felices por haber podido dejar en claro de que éramos pareja, porque manejarnos con disimulos iba a hacer todo el proceso demasiado tedioso. El pequeño detalle es que entre tanta emoción se nos olvidó preguntar algo muy importante: cual sería el costo del tratamiento...

En conclusión todo salió mejor de lo que nos imaginábamos, estabámos preparadas incluso para ser rechazadas por la doctora, ya que habíamos leído de una clinica que sólo hacía inseminación a parejas heterosexuales, pero afortunadamente nada de eso sucedió y nuestra primera cita resultó una muy agradable experiencia. Decidimos crear este blog porque Mónica habia buscado blogs venezolanos pero no conseguimos ninguno y nos pareció una buena idea compartir nuestra experiencia con otras parejas de mujeres.Seguiremos compartiendo nuestro camino después de cada consulta, eso es todo por ahora como dijo el ilustre....